La historia y el presente
La historia intenta dar razón de nuestro presente concreto; ante él no podemos menos que tener ciertas actitudes y albergar ciertos propósitos; por ello la historia responde a requeriemientos de la vida presente. Debajo de ella se muestra un doble interés: interés en la realidad, para adecuar a ella nuestra acción, interés en justificar nuestra situación y nuestros proyectos; el primero es un interés general propio de la especie, el segundo es particular a nuestro grupo, nuestra clase, nuestra comunidad.
Luis Villoro, «El sentido de la historia»